Sentarse en el sofá es uno de los momentos preferidos del día de todo el mundo, incluidos niños y mascotas. Es por eso que no nos debemos olvidar nunca de higienizar estos elementos de la casa. Hoy te damos algunos consejos para realizar la limpieza de sofás en tu hogar y tenerlos siempre perfectos para disfrutar de tus ratos libres.
Los sofás son uno de los muebles más utilizados en la casa, desde los mayores a los más pequeños, por ello es importante mantenerlos limpios para evitar la acumulación de bacterias y otro tipo de suciedad que pueda perjudicarnos. Además, si hay animales en casa, razón de más para realizar la limpieza de sofás regularmente, ya que depositan pelos y otras materias que traen en las patas.
Por otro lado, tanto la tapicería como el relleno interior de los sofás, están compuestos por materiales que poco a poco absorben todo tipo de aromas, de manera que cuando pasan mucho tiempo sin higienizarse comienzan a generar mal olor en casa. ¿Necesitas más motivos?
Aspirado
Lo primero es pasar la aspiradora por toda la superficie del sofá al menos una vez a la semana. No te olvides de levantar los cojines y aspirar todos los rincones para quitar migas, pelusas y partículas de polvo. Realiza el aspirado primero en el sentido de las tramas del tejido y después a contrapelo para llevar a cabo una higienización más profunda.
Si los sofás son de cuero o de un tejido muy delicado puedes olvidar este último paso.
Cepillado
Utiliza un cepillo suave humedecido con una mezcla de agua templada y unas gotitas de amoníaco perfumado. De esta forma eliminarás la suciedad y los malos olores cepillando toda la superficie en pasadas. Renueva la solución y aclara el cepillo cuantas veces sea necesario hasta que finalices la tarea. Para terminar, repite toda la operación pero esta vez solo con agua, para así eliminar los restos del producto. Finalmente deja las ventanas abiertas para que el tejido se seque a su aire.
Al igual que en el caso anterior, si los sofás son de cuero o de un tejido muy delicado no realices este punto.
Fundas
Si el sofá está cubierto por fundas estas también deben lavarse. Primero ponlas a remojo en una solución de agua y sal para asegurar la fijación de colores y evitar que destiñan. Posteriormente introdúcelas en la lavadora con un programa corto, con agua fría y utilizando un jabón para tejidos delicados. Así evitarás que se estropeen y arruguen en exceso.
Manchas rebeldes
Cuando hay manchas es necesario eliminarlas de forma individual antes de proceder a la limpieza general, de lo contrario podrían quedar cercos. El bicarbonato de sodio es un excelente aliado, y es que no solo acaba con la suciedad si no que también desinfecta y neutraliza malos olores. Humedece la mancha con un poco de agua templada y después cúbrela con un poco de bicarbonato. Una vez se seque pasa el aspirador y verás como la suciedad desaparece en un segundo. Si la mancha se resiste puedes repetir la operación.
Sofás de cuero
Los sofás de cuero precisan de un tratamiento especial. Elimina el polvo cada día para que no se acumule suciedad sobre él. Para ello, basta con pasar un paño suave y humedecido en agua destilada sobre toda la superficie. Para su limpieza es necesario utilizar un trapo o paño suave humedecido en una solución específica para este material (jabón neutro con agua destilada), ya que de no hacerlo así podría dañarse. Realiza movimientos circulares, aclara y seca el producto con un paño limpio.
Máquinas de vapor seco
Son utilizadas por personal cualificado para limpiar tapicería y realizar la limpieza de sofás de una forma más profunda y profesional en hoteles, empresas, transporte público, taxis, coches, etc. En Alfham podemos asesorarte sobre esta técnica.
¿Listo para realizar en tu hogar una limpieza de sofás? Si te ha gustado el artículo y además buscas una empresa de servicios de limpieza no dudes en visitarnos en Barcelona o escribirnos a través de nuestro formulario de contacto. ¡Te esperamos!
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